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Deja de robarte tu propia vida.

Por Fernando Maroño



¿Sabes que eres un ladrón?

Sí, tal cual… todos los días cometes el crimen más imperdonable que puedes hacer contra ti mismo: robarte tu propia vida.

¿A qué me refiero con esto?

Simplemente observa tu rutina diaria, la forma en que utilizas tu tiempo, la manera en que organizas tus actividades, cuánto le dedicas a las cosas de valor para tu vida, qué tanto crees en ti mismo y cómo usas el tiempo en cosas productivas que te encaminen a lo que quieres lograr de tu vida.

Lo más importante que debes tomar en cuenta tiene que ver con tu auto valoración y el uso que le das a tus conocimientos, aptitudes y habilidades.

Toda persona que NO cree en sí misma lo suficiente, que duda de sí y que además NO utiliza al máximo sus habilidades, literalmente SE ESTÁ ROBANDO A SÍ MISMO y a la gente que quiere.

¿Estás preparado para dejar de robarte? Entonces calcula:

¿Cuánto tiempo al día le dedicas a navegar por internet en cosas superfluas? ¿Cuántos memes ves y compartes al día? ¿Cuánto le dedicas a Facebook, Instagram, Snapchat, Tik Tok o cualquiera de las redes sociales que sólo malgastan el tiempo y no te dejan nada productivo? ¿En series y programas que no te ayudan a crecer? ¿Cada cuándo procrastinas lo que realmente tienes que hacer?

No te alejes del propósito de tu vida, hay que dejar de dedicarle a lo inútil lo único que no podemos recuperar: nuestro tiempo

Es muy triste ver a grupos de amigos, a familias y a parejas enfocados en sus aparatos móviles en lugar de enriquecer esas relaciones; en todos lados podemos observar cómo la conectividad digital se ha convertido en la desconexión personal.

Es demasiado el tiempo que le dedicamos a aquello que aparece en las pantallas en lugar de dedicárselo a aquellos que nos aman, que se preocupan por nosotros, que dependen de nosotros.



Debemos reaprender a relacionarnos, a dejar de lado los celulares mientras estamos con alguien y, sobre todo, a no obsesionarnos con recibir respuestas inmediatas sin valor en lugar de buscar profundizar las charlas en persona.

Robamos nuestras propias vidas cuando nos conectamos al mundo virtual, cuando dejamos de hacer aquello que tiene valor o de estar con quienes realmente nos importan.

Yo te pregunto: ¿Cuáles son las 5 cosas más valiosas en tu vida?

Y continúo con otra pregunta: ¿Cuánto tiempo DE CALIDAD realmente le dedicas a esas 5 cosas que dices que son tan valiosas para ti?

Me puedes contestar que tus hijos, tu pareja, tu familia, tus mascotas, tu trabajo, tu salud, tus amigos, etc. etc. son lo más importante… pero te aseguro que el tiempo que les dedicas, es MUCHO MENOR que el que pierdes (robándote y robándoles) en otras cosas y que no los incluiste.

Podrás decir que pasas mucho tiempo con ellos, pero te aseguro que no es tiempo de calidad. Una cosa es compartir un espacio al mismo tiempo (estar en casa con ellos, cada uno haciendo algo diferente) y otra es DEDICARTE a estas personas que dices valorar.

Todo esto sin contar aparte el tiempo que malgastas lamentándote de tu situación, quejándote de todo y de todos; preocupándote por un futuro que deberías estar construyendo proactivamente hoy en lugar de sufrir por algo que seguramente tiene solución, pero aún no la has encontrado… justamente por no dedicar ese tiempo en buscar la forma de sobreponerte al reto.

Ni con millones de monedas de oro se puede recobrar UN SOLO INSTANTE de la vida… ¿Qué mayor pérdida entonces que la del tiempo gastado en tonterías?

A veces los humanos pensamos que vamos a vivir eternamente, se nos olvida que nuestro paso por este plano es efímero, corto, finito… y en lugar de disfrutar, de crear, de realmente vivir la vida, nos robamos a nosotros mismos el poco tiempo que tenemos.

No llegues al final de tus días arrepintiéndote de lo que no lograste hacer por haber perdido el tiempo.

Deja de robarte tu propia vida… y vive de verdad.

Revista Digital

"Hablemos de

lo Bueno"

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