La ciudad y su gente
En Baja California quienes integran el grupo del Voluntariado saben que el cumplir compromisos es quizá la primera de sus responsabilidades. Y en eso se destaca el hacer frente a las necesidades que permita a sus instituciones estar al corriente de lo que marcan sus objetivos. Por ejemplo, quienes tienen un albergue, una oficina o los que programan jornadas de servicio.
Saben que para ello deben ser solventes. Así que su primera preocupación debe ser, asegurar la economía. ¿Cómo proveerse de lo necesario? A veces fijando cuotas económicas de sus propios miembros, otras nombrando a una persona especializada de captación de fondos. En ocasiones los mismos asociados se distribuyen el compromiso de buscar a benefactores. “Distribuyéndose la carga, se hace más ligera”. Se sale adelante con éxito.
Aunque podría parecer sorprendente para quienes están fuera del sector del Voluntariado, es buen momento para recordar que vivimos la época de elecciones. Los expertos dicen, que son las más importantes en la vida de México. Y lo son porque están por decidirse más de 20,000 puestos públicos. Este que podría ser un llamado a la participación de los Organismos de la Sociedad Civil (OSCs), vale la pena extenderlo a toda la ciudadanía.
No hagamos caso de los catastrofistas, con razón o sin ella, de que “la política no es para mí”. No todo puede ser malo y si recordamos la lucha de algunos sectores por tener el derecho al voto, pensemos que gracias a él, México ha podido sobrevivir en paz y con esperanza. Nadie debe dudar que el voto es el derecho supremo de la ciudadanía. Y las mujeres del pasado, con su activismo nos legaron el 3 de julio de 1955 ese derecho femenino, reconocido al cumplir los 21 años de edad.
Inexplicable que en las últimas elecciones los votantes de Baja California hayan acudido en porcentaje paupérrimo. ¿Ese incumplimiento es la mejor forma que hemos encontrado para la solución de los problemas sociales? Quizá la respuesta sería conocer más nuestra historia en ese terreno y buscar formas adecuadas para mejorar los asuntos públicos que es compromiso de todos.
Solo como una curiosidad les comparto que de acuerdo a la historia de México, aquí ya se votaba desde antes de la llegada de los españoles, pues los aztecas elegían la terna de los que podrían ser sus reyes. Hoy 2024 debemos proponernos que igual como cumplimos nuestras responsabilidades con las instituciones de servicio comunitario que tanto orgullo nos produce, cumplamos con nuestro derecho ciudadano de ir a votar.
Llenemos las urnas con nuestros votos, por las personas que nos hayan convencido con sus proyectos y su ejemplo.
Por Luz Elena Picos
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