Marion Rolando Soria

Por Gabriel Ibarra Ochoa

La literatura peruana siempre ha sido un río caudaloso en el que confluyen voces de distintas generaciones, estilos y geografías. En medio de este panorama diverso surge la obra de Marion Rolando Soria, escritora que ha sabido construir un universo propio, donde la memoria, la sensibilidad y las preguntas esenciales de la existencia dialogan con el lector.

Con una trayectoria que combina la investigación, la creación literaria y el compromiso con la cultura, Marion ha logrado que sus textos trasciendan las páginas para instalarse en la experiencia íntima de quienes los leen. Conversamos con ella sobre sus orígenes, su proceso creativo y la visión que tiene de la literatura en el Perú y en el mundo.

—¿Cómo nació en usted el interés por la literatura y la escritura?

Desde niña me sentí fascinada por las palabras. Creo que la literatura fue, en cierto modo, una forma de refugio y de exploración...

—¿Hubo algún libro o autor que marcó su camino?

Muchos, pero recuerdo con especial afecto las primeras lecturas de la narrativa peruana...

—En sus obras se perciben temas que giran en torno a la memoria, la identidad y las relaciones humanas. ¿Son estos los ejes de su escritura?

Sí. Me interesa explorar cómo las experiencias personales se entrelazan con la historia colectiva...

—¿Cómo es su proceso creativo?

Escribir es un acto de disciplina, pero también de intuición. Suelo escribir a primera hora de la mañana...

—Publicar en el Perú nunca ha sido sencillo. ¿Qué desafíos ha enfrentado?

Muchos. La falta de apoyo editorial es un obstáculo recurrente, pero también una oportunidad...

—¿Cómo ve la literatura peruana actual?

Muy viva, con nuevas generaciones que escriben desde sus realidades...

—¿Qué autores recomendaría a los jóvenes lectores?

No me gusta imponer lecturas, pero sí invitar a la curiosidad...

—¿En qué proyectos trabaja actualmente?

Estoy desarrollando un nuevo libro que combina narrativa y poesía...

—Para terminar, ¿qué mensaje le gustaría dejar a sus lectores?

Que nunca dejemos de leer ni de escuchar. La literatura nos recuerda que, aunque distintos, compartimos una misma humanidad.

Con una sonrisa serena y una voz que transmite convicción, Marion Rolando Soria se despide. Su mensaje es claro: la literatura es tanto un viaje hacia adentro como una invitación al encuentro con los demás. En sus páginas, como en esta conversación, queda encendida la certeza de que las palabras siguen siendo un refugio y una brújula.